Cinco días después de dar la voz de alarma, las autoridades alemanas han dicho este martes que los pepinos españoles no son el origen de la agresiva cepa de 'Escherichia coli' que ha matado a 15 personas en el país e intoxicado a varios centenares. Sin embargo, los comerciantes del país no piensan empezar a vender todavía la hortaliza procedente de nuestro país. Los agricultores españoles se quejan: el daño ya está hecho.
La mayoría de los comercios alemanes los retiró de sus estanterías el mismo jueves, cuando la responsable de Salud de la ciudad-estado de Hamburgo, Cornelia Prüfer-Storcks, anunció que se había identificado la peligrosa bacteria E. Coli en una partida de pepinos orgánicos provenientes de dos empresas hortofrutícolas localizadas en Málaga y Almería.
"Y a partir de ese día empezamos a retirar poco a poco el resto de productos españoles. Ya no vendemos ninguna fruta ni verdura de España", confirmaron portavoces de Kaisers, uno de los supermercados más grandes de Alemania.
"Nosotros no vendemos pepinos desde el jueves, pero sí otras verduras españolas, tanto ecológicas como normales", señaló por su parte el portavoz de prensa del gigante Metro, uno de los principales grupos mayoristas del país, propietario entre otros de los centros comerciales Galeria Kaufhof.
Incluso en nuestro país, la cadena alemana Lidl ha decidido suspender la venta de pepinos, sea cual sea su origen. Lidl España, que también suministraba pepinos a sus tiendas alemanas, ha suspendido el envío de estos productos.
Leave a comment