Acabo de recibir una postal de mi gran amiga Sanja Nykjär (Råå, Skåne Län, Sweden). A pocas personas le debo la gratitud que a ella confiero.
He de confesar, que desde un primer momento, me sorprendió su estupendo sentido del humor-poco expandido en las tierras del norte-; su amabilidad; su cercanía; su cordial trato para con los demás. Todo esto a poco de entrar en contacto. Hecho este que llamó sobremanera mi atención.
Recuerdo que una palabra tan española como es "flojera", su preferida en nuestro idioma, era suficiente para arrancarle una estupenda y abierta sonrisa. Amante de la Naturaleza, magnífica y apasionada trabajadora (allá donde pone empeño, meta que consigue, por muy duras que sean las inconveniencias con las que tropiece).
Si todas/os fuéramos capaces de afrontar la vida con ese estilo suyo tan propio, téngase la seguridad, que este mundo sería muy diferente al que, por desgracia, conocemos: abundan más las personas resentidas- con una clara evidencia de autocrítica para sí mismas, nunca tienen culpa de nada, siempre somos los demás los causantes de sus desgracias-.
Muchas gracias, Sanja, por ser como eres.
Desde el sur para el norte, con todo mi cariño, un fuerte y merecido abrazo.